Consejos Útiles

El pasajero debe despachar su equipaje en el mostrador asignado a la compañí­a aérea. A su vez allí­ se entregará la tarjeta de embarque y el talón de equipaje. En caso de facturar una mochila puede que en algunos aeropuertos te indiquen que la despaches en otro sector por poseer muchas tiras que dificultan el traslado a través de la cinta.

Por cuestiones de seguridad, BAJO NINGUN CONCEPTO debes custodiar, transportar o despachar un equipaje de personas desconocidas. Por más que amablemente te lo pidan o rueguen.

Si solo llevas equipaje de mano, varias compañí­as te permiten hacer su check in en lí­nea, imprimir la tarjeta de embarque o bien descargarla al teléfono móvil y dirigirte directamente a la zona de embarque. Algunos aeropuertos también poseen máquinas donde puedes gestionar e imprimir tu tarjeta de embarque (self-service check in).

Por cuestiones sanitarias y protocolares, no deberí­as olvidar las mascarillas y el gel hidroalcohólico.

Cada compañí­a aérea tiene su polí­tica de lí­mites de pesaje y cantidad de bultos. Dependiendo de la  compañí­a aérea, tipo de billete (clase básica, económica, business) y el destino, el lí­mite de equipaje puede variar. Generalmente oscilan entre 1 y 2 bultos de 20kg a 30 kg. Igualmente se recomienda consultar con la compañí­a previamente, para no tener sorpresas. Si el tipo de billete es de clase básica o económica, el despacho de equipaje por lo general hay que pagarlo como adicional. Por su parte, las compañí­as de bajo coste normalmente en la tarifa del pasaje NO incluye la facturación de bultos. Esto se abona aparte y por bulto siendo en la mayorí­a de los casos hasta 15 kg o 20 kg por bulto.

En caso de exceso del equipaje lí­mite impuesto por la compañí­a aérea, podrá despachar más peso del permitido u otro bulto, pagando la cantidad que esté establecida en concepto de exceso de equipaje. Como eso se paga en el momento del pesaje, se recomienda tener a mano efectivo u otro mecanismo de pago disponible y aceptado por la compañí­a.

Además del equipaje despachado se permite que el pasajero lleve como equipaje de mano determinados objetos de poco peso y volumen. Normalmente los lí­mites de peso oscilan entre 8 y 10 kg y las dimensiones de 55 cm x 40 cm x 20 cm. Aunque algunas compañí­as de bajo coste solo permiten lí­mite de peso aún menores.

A su vez algunas aerolí­neas (tanto regulares como de low cost) permiten un segundo equipaje de cabina más pequeño que el primero (35 x 20 x 20 cm), donde puedes llevar un abrigo, un ordenador portátil o una bolsa duty free. Ante la duda, se sugiere consultar previamente con la compañí­a aérea, sobre las limitaciones de dimensiones, pesos y bultos tanto en el equipaje despachado como el de mano. Cabe destacar que en los aéreos de clase básica, en la mayorí­a de los casos solo se incluye algún abrigo, un ordenador portátil o bolsa duty free. Pero el derecho al equipaje de mano hay que pagarlo como adicional.

Las compañí­as aéreas pueden negarse a transportar ciertos artí­culos que debido a su tamaño, forma, peso o caracterí­sticas no puedan ser considerados como equipaje. Para mayor seguridad, se sugiere no incluir en el equipaje despachado artí­culos perecederos, frágiles, objetos de valor (dinero, joyas, artí­culos electrónicos, etc.), medicinas, documentos, llaves, etc. Algunas compañí­as no se hacen responsables por la integridad o desaparición de estos artí­culos.

Por razones de seguridad, existe una serie de objetos que están prohibidos llevar consigo en el avión y por ende deben ser declarados como equipaje de despacho siempre y cuando estén permitidos. Algunos de ellos son; Armas de todo tipo, objetos punzantes, objetos contundentes, elementos explosivos o inflamables, sustancias tóxicas o quí­micas. En caso de llevar consigo elementos líquidos o cosméticos deberá almacenarlos en bolsas transparentes, y en caso de sustancias lí­quidas, no superior a 100 ml.

Bebidas o alimentos perecederos o no cerrados en su envase original, no son permitidos de pasar el puesto de control. Una vez pasado el puesto de control, podras comprar alimentos o bebidas en los duty free y subirlos al avión. En el caso de alimentos frescos, algunos paí­ses no lo permiten (aún comprándolos en zona de embarque). Consulta con tu aerolí­nea.

Si el pasajero transporta armas de fuego deberá dirigirse a la oficina de armas del aeropuerto de salida para obtener la autorización necesaria, además de contar ya con autorización previa y llenar unos formularios. Las armas y municiones han de ir embaladas en un estuche adecuado y le serán devueltas en la oficina de armas del aeropuerto de llegada.

A su vez, en la zona de controles se suele solicitar a quienes porten dispositivos tales como tablets, cámaras, móviles u ordenadores portatiles (notebooks) de pasarlos por la cinta de rayos fuera de la funda o bolsa y en una bandeja aparte, junto con las llaves, cinturón, documentación, cartera o billetera.

Determinados equipos electrónicos, como los portátiles o los teléfonos móviles pueden interferir los sistemas de la aeronave y afectar a la seguridad del vuelo. En la mayorí­a de los casos deberás usarlos en modo avión, al menos en los momentos en que el comandante de la tripulación lo solicite (normalmente suelen ser al despegue y aterrizaje.

Resulta conveniente que el pasajero cuando realice la reserva o compra del pasaje, consulte con el operador o la compañí­a aérea, sobre los requisitos para el transporte de mascotas o animales domésticos.

La compañí­a aérea es responsable del daño causado en caso de destrucción, pérdida o daños del equipaje despachado cuando el hecho que haya causado el deterioro, se haya producido a bordo de la aeronave o mientras el equipaje despachado se encuentre bajo la custodia de la compañí­a.

No obstante, la compañí­a no será responsable en la medida en que el daño se deba a la naturaleza o defecto propios del equipaje. En caso de las compañí­as de bajo coste, la mayorí­a no incluye el seguro de equipaje en el precio standard, y el mismo es ofrecido bajo un cargo adicional.

También es responsable del daño ocasionado por retraso en el transporte de equipaje, salvo que pruebe que se adoptaron todas las medidas que eran razonablemente necesarias para evitar el daño o que les fue imposible adoptar dichas medidas.

Resulta de vital importancia que en el caso de incidencias con el equipaje despachado, llámese pérdida, destrucción total o parcial o bien retraso; el pasajero efectúe en ese momento la protesta correspondiente. Ante la duda, consulta con la oficina de información del recinto para que lo asista. Para prevenirse de estos inconvenientes lleva una muda de ropa en tu bolso de mano. En este sentido, también resulta conveniente contar con algun seguro de viaje que incluya daños o pérdidas de equipaje.